Cómo empezar un huerto comunitario

¿Estás buscando un huerto comunitario, un pedacito de tierra para cultivar? En pocos años han pasado de ser algo (casi) residual en los que sólo se veía a gente mayor a convertirse en un fenómeno social, integrador, reivindicativo y que seguro que está dando más de un dolor de cabeza a algún Ayuntamiento.

Esta semana encontré la noticia de que París permite por ley que cualquier ciudadano cultive comida sana y sostenible en cualquier lugar de la ciudad. Me puse a tirar del hilo y aluciné con la que tienen ahí montada. No sé cómo andáis de francés, pero ahí va el enlace que siempre se puede consultar con el traductor de Google. ¿No sería maravilloso ver un mapa así de nuestras ciudades?

Eso me ha hecho pensar que a menudo me contactáis preguntando si sé cómo conseguir un trocito de tierra para cultivar en vuestra ciudad. Así que ahí van algunos consejos para empezar la investigación.

Pregunta por los huertos en tu Ayuntamiento

Cada vez son más los municipios que habilitan parcelas para la práctica de la horticultura. Lo mejor es que te acerques a tu Ayuntamiento y preguntes así, directamente. Dirígete al Departamento de Medio Ambiente o Sostenibilidad, donde puedes encontrarte con dos respuestas:

No, no tenemos huertos municipales.
En ese caso, pregunta si hay algún proyecto en marcha a nivel vecinal del que puedan informarte. Pregunta también si el municipio se ha planteado poner en marcha una red de huertos comunitarios en un futuro. Quizá están en ello y en tal caso es probable que exista una lista de espera en la que te puedas apuntar para estar informado sobre ello.
Sea cual sea la respuesta, pide un correo de contacto y de vez en cuando mándales un mail insistiendo. Si ven que hay interés, puede que finalmente se lo planteen.

Sí, tenemos huertos pero están todos concedidos.
Habrá que preguntar por la lista de espera, apuntarse en ella aportando la información que te sea requerida y tener paciencia. Porque a veces pasarán años hasta que te toque. De todos modos, pregunta si existe algún huerto comunitariogestionado por algún colectivo. Aunque el Ayuntamiento no esté involucrado en el proyecto, seguro que saben de alguno.

Pregunta en tu Asociación de Vecinos

Otro camino para continuar la investigación es contactar con entidades ecologistas, grupos de consumo y la asociación de vecinos de tu barrio. Aquí la cosa cambia, porque es probable que exista pero ligado a algún movimiento alternativo, reivindicativo y/o asambleario.

Un huerto comunitario, sea del tipo que sea tiene un componente social muy fuerte que le permite tejer redes entre las distintas entidades sociales, culturales y educativas del barrio o la ciudad. A menudo se involucran colectivos muy activos, como los desocupados, la gente mayor o las escuelas. Claro que todo depende del barrio o de la ciudad. En la mía, es así.

La mayoría de los huertos que conozco han empezado muy ligados a movimientos okupas que finalmente han acabado consiguiendo una cesión del espacio. Están ubicados en solares edificables que se han convertido en nidos de suciedad, ante la pasividad de los propietarios. ¿Porqué no convertirlos en un espacio útil mientras no se construye nada en ellos?

La investigación suele empezar en el Registro de la Propiedad, donde te pueden facilitar algo de información sobre el propietario. También llamando a la puerta de las casas vecinas, que suelen saber algo sobre el tema. Ya sabéis: cosas de radio patio.
El proceso no siempre es fácil y pueden surgir impedimentos, pero lo cierto es que muchos huertos comunitarios se han creado de este modo. En ocasiones, se puede conseguir que el Ayuntamiento actúe como mediador entre los vecinos y la propiedad. Todo depende (supongo) de cómo se presente el proyecto y de las ganas o la actitud del técnico municipal o del partido político que esté gobernando en esos momentos.

Pregunta en las Escuelas

Muchas escuelas disponen de espacios no habilitados en los que se podría crear un huerto pero no lo hacen por miedo o inseguridad. Suele faltarles algo de empuje o algún miembro del claustro que quiera involucrarse en el proyecto. ¿Y si les aportas tus ganas y hacéis algo chulo con los peques?
El problema en estos huertos suele llegar en verano, cuando finalizan las clases, los niños desaparecen y la escuela se cierra. Justo en el momento en que las plantas inician su producción, que ya es mala suerte. Pero si la relación con el claustro y la dirección del centro ha sido fluida, seguro que podéis llegar a un acuerdo que os permita acceder al huerto durante esos meses.
De ser así, dejad algunos frutos en las matas para que los niños los vean cuando regresen en septiembre.

De todos modos, sigo alucinando con el mapa de huertos en París. ¿Algún día veremos algo así en nuestras ciudades? Ojalá…

Me encantan los huertos urbanos y el cultivo de hortalizas en macetas. En 2005 empecé a contar qué tal me iba en las redes y así fué como me convertí en PicaronaBlog.
Imparto talleres de huerto urbano, colaboro en medios especializados y en 2014 publiqué mi primer libro, Hortelanos de ciudad.

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6 comentarios

  1. Hola Esther! Muy bien post, lo explicas muy claro.
    Aquí en Valencia hace algunos años que han empezado a moverse tanto los huertos municipales que ceden los terrenos así como los alquileres de terrenos.
    Es cierto que ahora está más normalizado, pero estos huertos siempre han estado, aunque su gestión era mayoritariamente por personas jubiladas.
    De todas maneras sigo viendo cada día multitud de solares o huertos abandonados que podían gestionarse por la gente del lugar.
    Poco a poco seguiremos cambiando la mentalidad de los huertos urbanos.
    Un beso.

  2. Me encanta la idea de Paris. Aunque aquí lo veo inviable. Somos tan burros que alguno se cargaría hasta los sembrados con flores. Pero si sería buena idea aprovechar esos solares abandonados llenos de porqueria que no se usan, por lo menos hasta que su dueño edifique, o esos rincones en los que no hay más que mala hierba. A mí me has animado a preguntar en mi ayuntamiento a ver si hay alguna idea al respecto.

  3. Hola Ester, estoy en Guadalajara, Jalisco, México, mi país es semi árido y hay mucha gente como yo, que no tenemos la cosa fácil ni acceso a tierra. Somos creaturas de ciudad, y estoy por iniciarme en los misterios de los huertos urbanos de la manera más ruda, como autodidacta, buscando y buscando información y experiencias en la red, con la firme convicción de cambiar vidas y compartir lo poco o mucho que pueda aprender. Apenas te encontré y tu trabajo me resulta inspirador. Soy profesor universitario. Te dejo un abrazo y mis mejores deseos.

    1. Hola Jorge, y bienvenido a la maravillosa aventura del cultivo de hortalizas en casa!
      Seguro que podrás seguir adelante y conseguir maravillosas cosechas en tu tierra.
      Un saludo y gracias por tu visita.

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